Capítulo 15

A la mañana siguiente desperté y al abrir los ojos me encontré con los suyos a milímetros de los míos, que bonita forma de despertar.

- Buenos días princesa - me dijo él con una sonrisa, ¿has dormido bien?- Buenos días mi zanahorio - dije yo también con una sonrisa - he dormido muy bien- Yo también he dormido muy bien contigo - me abrazó y yo a él, nos quedamos mirando a los ojos y nos besamos.Estuvimos un rato así, abrazados y mirándonos a los ojos, sin necesidad de palabras, hasta que a él le gruñó el estómago.- Vaya, parece que tienes hambre - dije yo, divertida.- Sí, bastante, voy a preparar el desayuno, tú quédate aquí - dijo él incorporándose.- Jo, pero yo quiero ayudar - puse cara de niña pequeña.- No, te quedas aquí y yo te traigo el desayuno - me dijo él, se acercó y me dio un beso - ahora vuelvo mi princesa.Salió por la puerta y oí cómo bajaba las escaleras, me quedé mirando al techo pensando en él, en lo que le amaba. Me dí la vuelta en la cama y me puse en el lado en el que había dormido él, estaba calentito y olía a él. Aspiré su olor y me tapé aún más con la manta, hasta la cabeza, me quedé dormida.- Voy a hacer el desayuno y tú aprovechas para dormirte, menos mal que querías ayudar... - me despertó su voz cerca de mí, pero no me moví ni un milímetro, quería ver qué era lo que hacía cuando pensaba que estaba dormida.Me retiró el pelo con la mano y noté que se sentaba a mi lado, me dio un leve beso en la nuca y me empezó a acariciar el pelo mientras murmuraba mi nombre.- Sophia... Qué guapa eres... ¿Sabes? Desde el primer momento que te vi, pensé que eras muy guapa y sentí como una punzada en el corazón, por eso me acerqué a ti en la puerta del baño y, bueno, el resto ya lo conoces... - murmuró mientras me acariciaba el pelo y la cara.- Tú también me pareciste muy guapo cuando me empecé a hacer fan de vuestro grupo y cuando te vi allí... Casi me da algo - dije abriendo los ojos y observando su cara cerca de la mía.- ¿Lo has oído todo? - dijo él mientras los colores se le subían a la cara.- Sí, pero no te sonrojes y vamos a desayunar, que tengo hambre - dije observando la bandeja que tenía frente a mí, estaba cubierta por un trapo.- Ah sí, es verdad - dijo él retirando el trapo - ¡Tachán! Zanahorias para mí, tortitas con forma de corazón para tí y zumo de naranja para los dos.- Awww... ¿Cómo puedes ser tan mono? - le pregunté yo mientras le daba un abrazo.- No sé, simplemente te quiero - me dio un rápido beso en los labios - y ahora a comer que tengo hambre.Nos comimos todo el desayuno, él me robó alguna tortita y yo una zanahoria. Bajamos en pijama al salón, total, no había nadie, Harry aún no había vuelto de casa de Lauren.

- Qué raro que Harry no haya venido aún, ¿no? – comentó Louis un poco extrañado.

- Sí, tienes razón, estará en casa de Lauren aún – dije yo.

- ¿Les llamamos a ver qué están haciendo? – preguntó él con una sonrisa malvada mientras cogía su móvil.

- No, jajaja, a ver si se van a enfadar o algo por fastidiarles el momento – reí yo – mientras podemos nosotros aprovechar que ellos no están, ¿no?

- Uy que ideas me das… - dijo él con tono pervertido acercándose a mí.

- ¡Pervertido! – exclamé divertida, me acerqué a él y le dí un corto beso en los labios, luego me levanté y me tumbé en el otro sofá.

- Gracias jaja, ¿por qué te vas a ese sofá? Vente aquí conmigo – dijo haciendo pucheros.

- No, prefiero este sofá porque me puedo tumbar – dije riéndome – tus pucheros no hacen efecto – me reí más.

- Bueno, pues si tú no vienes, voy yo – se levantó de su sofá y se tumbó a mi lado en el sofá.

- Jo, con lo bien que estaba yo… - dije yo de broma.

- Vale, vale, prefieres al sofá antes que a mí – hizo como que se enfadaba – muy bonito, eh, muy bonito.

- Que no tonto, que yo te quiero a ti – le cogí de la cintura para que no se fuera.

- Pues ahora me enfado.

- Noo, no te enfades…

- Vale, no me enfado – se giró hacia mí y me besó.

- ¡Bien! ¿Y ahora qué hacemos? – pregunté yo.

- No sé, ¿te apetece venir a dar un paseo?

- Vale, si quieres invitamos a todos a que vengan aquí a comer y así nos aburrimos todos.

- Buena idea.

Louis les envió un WhatsApp a los chicos invitándoles y yo a las chicas, después, nos levantamos, nos vestimos (yo con mi ropa del día anterior) y salimos a dar un paseo.

(Narra Liam)

Al día siguiente de esa cita tan perfecta con Emily, decidí llamarla para quedar otra vez con ella, la echaba de menos. Cogí el móvil para llamarla y en ese momento me empezó a sonar. Vi su foto en la pantalla y sonreí como un tonto.
//////LLAMADA TELEFÓNICA//////
- ¿Emily?
- La misma, hola Liam.
- Hola, ¿qué pasa?
- Nada, solo quería decirte si querías quedar hoy...
- Ah, vale, encantado, ¿dónde y cuándo?
- Pues no sé, si quieres vente a mi casa a ver una película o algo... Aunque están mis padres...
- Bueno, vente tú a la mía y ponemos alguna, ¿vale? Y luego si quieres damos un paseo.
- Vale, gracias, ¿a qué hora voy?
- Ven ya si quieres, son las 11.
- Vale, ahora voy, te quiero amor.
- Y yo cielo.
//////FIN LLAMADA//////
Me puse unos vaqueros y una camisa y me peiné un poco mientras esperaba a que ella viniera. Justo cuando acabé, llamaron al timbre, yo corrí a abrir y allí estaba ella, tan guapa como siempre.
- Hola princesa - la saludé yo.
- Hola cielo - nos dimos un corto beso.
Pasamos al salón y estuvimos un rato decidiendo la película, al final vimos Lo Imposible, una película española basada en hechos reales.
- Dicen que está muy chula - dije sentándome en el sofá a su lado.
- Seguro, pero si estoy contigo todas son chulas - dijo ella apoyando su cabeza en mi hombro.
- Oh, te quiero mi princesa - le dije yo, ella se sonrojó un poco.
- Me gusta que me llames princesa - reí.
Empezamos a ver la película los dos cogidos de la mano y ella con su cabeza apoyada en mi hombro. A media película o así noté cómo se quedaba dormida, así que la cogí y la llevé a mi habitación, yo me senté en una silla, no me cansaba de mirarla.